AL PÚBLICO LE GUSTAN LAS COPRODUCCIONES
Coproducciones europeas
Películas internacionales
La coproducción facilita una financiación y unos medios mayores y a la vez amplía los mercados, necesidades igual de actuales que cuando se iniciaron en 1953 en España, generalizándose en las décadas de los 60 y 70. El abogado y productor Alberto Grimaldi, practicó la coproducción desde sus inicios, en 1963, con El vengador de California, hispano-italiana, y en su gran éxito de los primeros tiempos, también colaboración española e italiana,, La muerte tenía un precio. Abandonó el género del western y el de aventuras, por un cine más comprometido, pero siguió coproduciendo películas como, El último tango en París (Italia-Francia) o Saló o los 120 días de Sodoma (Italia-Francia). A Grimaldi le gustaba la fórmula porque no genera una asociación entre los coproductores, sino una propiedad indivisa sobre los materiales para la obtención de copias y un reparto de ingresos y mercados. Francia y Alemania coproducen anualmente más del 50% de su producción, mientras que España, pionera en esta fórmula desde 1953, oscila entre el 32 y el 36%, de media anual.![]() |
| El hijo de la novia |
Los Estados con sistemas de protección han establecido Acuerdos bilaterales para regular cuando y qué ayudas corresponden a las coproducciones. España tiene Acuerdos vigentes con trece Estados. El aumento de las coproducciones y la necesidad de facilitarla a productores de Estados sin Acuerdos entre sí o que prefieran regirse por normas más generales, promovió el Acuerdo Europeo de Coproducciones en1992 y el Acuerdo Iberoameriano de Coproducciones de 1989.
Las coproducciones españolas tipo´, que favorecen la creación personal, son frecuentemente tripartitas, Mar adentro (España, Francia e Italia) o bipartitas, como Todo sobre mi madre (España-Francia) e igual los franceses como la exitosa franco-belga, Nada que declarar. Los productores europeos suelen recurrir también a ellas para películas de alto presupuesto, como Los tres mosqueteros en 3D (Reino Unido, Francia y Alemania), con gran aceptación por el público. Y en estos tiempos de difícil financiación, al contar con una subvención menor, los productores españoles recurren a ellas cada vez más, como vemos en las películas españolas seleccionadas por el Festival de San Sebastián de este año, que alcanzan la cifra de veintitrés en sus distintas secciones. Doce son coproducciones: 2 con Argentina, 2 con Argentina y Francia, 1 con Francia y Uruguay, 1 con Perú. Argentina y Colombia, 1 con Francia y Bélgica, 1 con Reino Unido, 1 con República Dominicana, 1 con Francia, 1 con Canadá y 1 con Alemania, Están representadas todas las modalidades de coproducción y han permitido conservar sus características nacionales, argentinas en El clan de Pablo Trapero y la española en Regresión de Alejandro Amenábar. El exceso de películas españolas en el Festival no ha beneficiado al cine español, ya que ha puesto de relieve que creativamente no pasa por su mejor momento. La coproducción de El clan es similar en su planteamiento a la de El hijo de la novia o Relatos salvajes.
Los productores eligen temas nacionales o locales, para así optar a las ayudas públicas de sus países. En ocasiones consiguen obras maestras o suficientemente atractivas, que son aceptadas internacionalmente, sin embargo esta temática dificulta muchas más veces su circulación internacional. Obstáculo que superan las coprodicciones, ya que en la actualidad están teniendo unas buenas taquillas en diferentes países. Esta cualidad cobra hoy en día gran importancia, sin olvidar la de completar la financiación.
Si nos preguntamos cómo aprovechar la experiencia económica y estética para mantener el nivel de producción, veremos que partiendo siempre del talento para desarrollar un proyecto atractivo, son claves la coproducción y el incremento que se está produciendo en Europa de las desgravaciones ((tax-shelters) a los inversores en producción cinematográfica. Explican el auge de la producción europea, pero no nos hagamos ilusiones, no bastará sin una distribución fuerte. 






